Si está registrado o no en la historiografía arequipeña es irrelevante para nuestros fines gastronómicos. Dícese que fueron trece las monjas que habitaron inicialmente el Monasterio de Santa Catalina fundado el 10 de setiembre de 1579 por Doña María Guzmán viuda de Don Diego Hernández de Mendoza. Contradiciendo la hipótesis dícese también que fueron más bien trece las monjas que sobreviven actualmente en clausura luego de que el monasterio abriera sus puertas al público en 1980.

Real o no, lo cierto es que la mayor joya arquitectónica de la Ciudad Blanca está llena de misterios y fuera de sus muros la vida nocturna arequipeña es pródiga en eventos culturales y culinarios aprovechando que el buen criterio municipal ha hecho de esa calle peatonal y de sus veredas uso público con mesas, sillas y sombrillas para solaz de turistas y parroquianos locales.

Ahí está restaurante 13 Monjas, un acogedor local de paredes de sillar, lamparines de fierro forjado, techos abovedados, hornacinas y un patio central interno empedrado que recibe la sombra de higueras centenarias.

El restaurante nació pocos meses antes de la pandemia gracias al empresario restaurantero Alfonso Núñez quien tiene varios emprendimientos gastronómicos en la ciudad. Su idea fue ofrecer una cocina ligera, agradable, bien hecha y sin complicaciones. La primera carta la trabajó Jimbo Daniel Echevarría, el ganador de Master Chef el 2011, luego otros cocineros limeños fueron aportando lo suyo, capacitando regularmente a los locales e introduciendo nuevos platos para rotar la oferta.

Ahora sus estrellas son el pollo tikki, las pizzas trabajadas en horno de leña, las pastas, los panes naan, el jamón artesanal que lo ofrecen en piqueos y la gran variedad de cervezas artesanales de origen nacional o extranjero. Tienen opciones veganas, coctelería variada, vinos de bodegas pequeñas e interesantes fermentados arequipeños (todo un descubrimiento el “anaranjado de Caravelí”). Gracias al asesoramiento de La Gastrónoma y de los chicos de Book Vivant organizan catas, lecturas y presentaciones de libros.

El ambiente es distendido y agradable. Juegan con el concepto de “monja” (la curiosa, la supersticiosa, la esotérica, la pensadora) para los posavasos y los marcadores de libros y la cuenta llega invariablemente en medio de un libro empastado en cuero y look antiguo (yo me enganché con Gringo Viejo de Carlos Fuentes, continuaré leyéndolo en mi siguiente visita).

Ficha técnica: Dirección Santa Catalina 300 b1. Tel: 913200214. Horario de atención: de lunes a domingo de 8.30 am a 23.30.